miércoles, 24 de octubre de 2007

La mujer que no podía dejar de hacer preguntas y el hombre que sólo podía decir no. Escena de amor. Creatura Nº 22.

Delirio vano è questo!

La mujer que no podía dejar de hacer preguntas y el hombre que sólo podía decir no. Escena de amor.

La escena es una cafetería. Mesas, sillas, ocupadas o llenas al fondo. En primer plano un hombre y una mujer. Ella es rubia y con el pelo rizado. Él no. Hay, sobre la mesa, un café, los restos de un azucarillo, un bolso y un refresco del que él bebe de vez en cuando. Cuando sube el telón la conversación ya hace rato que ha comenzado.

Mujer: ¿Quieres venir al cine el viernes?
Hombre: (Sorprendido) No.
Mujer: ¿Y el sábado?
Hombre: (Turbado) No.
Mujer: ¿Y el domingo?
Hombre: (Más turbado todavía) No.
Mujer: (Empezando a enfadarse) ¿Será posible? ¿No te gusta el cine?
Hombre: (Sincero) No.
Mujer: (Más calmada ya) ¿Es que te asusta la oscuridad?
Hombre: (Seguro) No.
Mujer: (Un poco incitante) ¿Tienes miedo a que te ataque cuando se apague la luz?
Hombre: (Tontín) No.
Mujer: (De nuevo enfadada) ¿Por qué no? ¿Es que crees que no puedo hacerlo?
Hombre: (Abstruso) No.
Mujer: (Confusa) ¿Lo crees o no lo crees?
Hombre: (Frío) No.
Mujer: (Aliviada) ¿Es posible entonces que vengas al cine conmigo?
Hombre: (Sincero) No.
Mujer: ¿Entonces podemos ir al teatro?
Hombre: (Convencido) No
Mujer: ¿No te gusta tampoco el teatro?
Hombre: (Mentiroso) No.
Mujer: ¿Es porque es aburrido?
Hombre: (Sin convicción) No.
Mujer: ¿Es porque ya no hay buenos autores?
Hombre: (Confuso) No.
Mujer: (Escamada). ¿Crees que hay buenos autores?
Hombre: (Recuperando la seguridad) No.
Mujer: ¿Ves?
Hombre: (Rotundo) No.
Mujer: ¿No ves que nos gustan las mismas cosas?
Hombre: (Más rotundo) No.
Mujer: ¿No ves, amor mío, que somos almas gemelas?
Hombre: (Rotundísimo) No.
Mujer: (Llorando a moco tendido) ¿Es que no me quieres?
Hombre: (Con la mosca tras la oreja) No.
Mujer: (Llorando más aún) ¿Es que no soy atractiva?
Hombre: (Valorándola) No.
Mujer: (Al borde de la apoplejía por llanto) ¿Tan fea soy?
Hombre: (Mirándola el escote) No.
Mujer: (Calmada de repente) ¿No soy fea?
Hombre: (Sonriente) No.
Mujer: (Con cierto aire de suripanta) ¿No crees que hay por ahí muchas mujeres mucho más guapas que yo?
Hombre: (Engatusándola) No.
Mujer: (Casi melosa) ¿Crees que soy más atractiva que Scarlett Johansson?
Hombre: (Casi jurando sobre la Biblia) No.
Mujer: (Una vez más enfadada) ¿Serás…?
Hombre: (Inconsciente) No.
Mujer (Pensativa) ¿Crees que Elsa Pataki es más atractiva que yo?
Hombre: (Mintiendo como un bellaco) No.
Ella se acerca y lo besuquea por todas partes, él se muestra un poco indiferente, sobre todo al principio, luego resignado y finalmente complacido. Cualquiera podría pensar que ella ya le ha cogido el truco a él.
Mujer: ¿Así que soy la mujer más atractiva de España?
Hombre: (Con certidumbre) No.
Mujer: (Sorprendida) ¿No?
Hombre: (Con más certidumbre) No.
Mujer: (Volviendo a enfadarse porque, aunque parezca mentira, no ha cogido el truco, aunque tal vez lo vaya pillando ya) ¿Soy la más atractiva de Toledo?
Hombre: (Con tanta certidumbre que asusta) No.
Mujer: (Empezando a perder los nervios) ¿Soy la más atractiva de Illescas?
Hombre: (Certidumbre y media) No.
Mujer: (A punto de darle de bofetadas) ¿Me quieres decir quién es más atractiva que yo en este pueblo?
Hombre: (Asustado) No.
Mujer: (Comprendiendo de repente) ¿Hay en Illescas una mujer más atractiva que yo?
Hombre: (Meloso) No.
Mujer: ¿Hay en Toledo una mujer más atractiva que yo?
Hombre: (Tierno) No.
Mujer: (Manejando ya la situación) ¿Me odias?
Hombre: (Más meloso) No.
Mujer: ¿Me detestas?
Hombre. (Todavía más meloso) No.
Mujer: ¿Estarías con cualquier otra antes de estar conmigo?
Hombre: (Timándose con ella) No.
Mujer: ¿Es cierto que no me quieres?
Hombre: (Pudoroso) No.
Mujer: (Que en el calor del momento se equivoca) ¿Así que me quieres?
Hombre: (Confuso) No.
Mujer: (Con la felicidad extrema de quien ha conseguido lo que quería) ¿Hay una mujer en el mundo a la que quieres más que a mí?
Hombre: (Rojo de vergüenza) No.
Mujer: (Extasiada) ¿Podríamos ser más felices?
Hombre: (Feliz) No.
Mujer: (Viendo su oportunidad) ¿Te gustaría casarte con mi hermana?
Hombre: (Negando también con la cabeza) No.
Mujer: (En el momento más feliz de su vida porque por fin ha sido mejor que su hermana) ¿Quieres que no nos casemos en mayo?
Hombre: (Sincero) No.
Mujer: (En el paroxismo mismo del disfrute) ¿No es fantástico?
Hombre: (Resignado) No.
Pagan, se marchan de la cafetería y se alejan ambos cogidos de la mano, mientras estúpidamente cae el TELÓN.
[Dedicado a los amigos que desde México visitan tan frecuentemente este blog.]

3 comentarios:

Creatura dijo...

¡Me gustó este relato! Más adelante tendrías que considerar uno nuevo en el que todas las respuestas fueran "Si"

Rubén dijo...

Es una idea. O uno que sólo pudiera decir una palabra rara tipo esternocleidomastoideo. Esa sería una buena respuesta para todo.

Creatura dijo...

¡Pues ya sabes!